El 1 de julio de 1934 Hitler decidía depurar la SA por temor a que sus líderes pudieran plantarle cara. Se eliminó a toda la cúpula dirigente del cuerpo comenzando por Ernst Röhm. Ayer fuimos testigos de una purga política en Twitter que hizo las delicias del Team Facha y todos sus seguidores, entre los que obviamente me encuentro.

Hay que contextualizar todo para su debido estudio. El Team Facha, que es así como este autodenominado grupo se hace llamar, está formado por usuarios de Twitter que comparten, con matices, una corriente ideológica; se podría decir que este movimiento recoge todo el espectro político desde los liberales-conservadores hasta movimientos de derecha pura y dura. Sus miembros no forman un sustrato homogéneo; se pueden encontrar perfiles de todo tipo. Tenemos por ejemplo a Ivaningrado, Froilán I de España, el desaparecido Españabola y el abatido en combate Kiwi que poco se sabe de él. En los perfiles de todos estos miembros, y de los que faltan, se puede encontrar de todo, pero el contenido casi nunca llega a defraudar: memes ofensivos, tuits de crítica enfurecida a periodistas o políticos y vídeos variados.

Durante esta semana se propagó que la mayoría de estos usuarios no eran más que bots (una especie de robot programado con un fin único) rusos creados para desacreditar al Gobierno de España. La noche del 8 de abril de 2020 quedará en la memoria de todos por ser el momento en el que una panda de tuiteros dejaron en ridículo a supuestos desmentidores de bulos, activistas de izquierda y políticos con menos luces que una patera. La acción fue coordinada e impecable, aunque la operación aún no ha recibido nombre alguno. Muchos tuiteros comentaron en los perfiles de personalidades como Javier Bardem, Ana Pastor, Elisa beni, Marta Flich o Ismael Serrano. Todo apunta a que el origen del ataque es del usuario Coronel Olrik, también desaparecido en combate, pero con una nueva cuenta:

Así, el troleo comenzó con mensajes similares a éste o con tuits en ruso de multitud de perfiles que ahora han caído en el baneo. Los supuestos periodistas que se las daban de listos al ver una evidencia clara del bulo que soltaron días atrás. Pero parece ser que en este momento todavía no se han dado cuenta de que han quedado en evidencia y no son más que títeres mongólicos.

Gloria a los caídos.